viernes, 25 de febrero de 2011
TESTIGO OCULAR
Lo ví inclinarse y
de la tierra tomar un puñado de barro
Lo ví moldearlo con mucha paciencia y crear al hombre
luego ví como sopló en sus narices el aliento de la vida
y el hombre llegó a ser un ser viviente
Juro que lo ví
Luego, no conforme, le regaló al hombre
un jardín que estaba encantado
impregnado de flores, árboles, animales y aves
Lo ví, lo juro
Creó todo para él
hasta otro ser, una mujer, Eva
Todos lo niegan,
pero lo juro
Yo lo ví
miércoles, 23 de febrero de 2011
¡DESPIERTA!
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viernes, 18 de febrero de 2011
REENCUENTRO
¡Allí estaba, intacta, de inigualable belleza, imponente! Su proximidad a las aguas verdi-azules del mar la hacía parecer como si estuviera enclavada en el centro del Mar Caribe. Pronto, entré en un espeso bosque de cocoteros y almendros que me llevaron a un portón. Lo empujé fuertemente arrancando una enredadera de hiedra que se aferraba a la superficie del poste. Suspiré, refugiándome en los momentos de infancia mientras miraba a mi alrededor. Un abejorro, interrumpió mi pensamiento, salió volando de entre el rosal dándome la bienvenida.
Regresar aquí, me causaba nostalgia, una extraña sensación, como quien acaba de encontrar a alguien que habia estado buscando durante largo tiempo, como si....., no sé, imposible de explicar.
Abrí la puerta principal y entré a la sala, allí estaba el majestuoso reloj antiguo de péndulo que timidamente marcaba las tres.Las cortinas de terciopelo rojo contrastaban con los muebles que tapizados en un finísimo brocado aun conservaban todo el esplendor de la época. Sobre el mantel de hilo con encajes que vestía la mesa del comedor reposaba uno de los arreglos de rosas y azahares que como ritual mi madre recogía del jardin. Todo estaba intacto, cuidadosamente decorado,impecable, tanto así, que hasta el piano de cola parecia tocar solo. La música me invadía por completo y mi cuerpo se movia al compás de la melodía. Cuando vine a darme cuenta estaba delante del espejo de bronce labrado. Levanté la mirada, me asusté, no lo podía creer, la imagen que el espejo reflejaba era la de una niña de tez pálida, pelo rubio, ojos pardos,vestida de color rosa en satin y arandelas de tul, y zapatos de tacones. Nos miramos en un silencio interminable. Rompiendo el silencio, me animé a preguntarle, ¿Eres?
...¿Quien sabe si esta otra mitad de la vida en que creemos estar despiertos no es
sino un sueño, un poco diferente del primero, del que despertamos cuando creemos dormir. Pascal
jueves, 10 de febrero de 2011
¿ESCOGEMOS A NUESTRAS MASCOTAS O ELLAS A NOSOTROS?
"Quien distingue la sonrisa de un perro ha dejado de ser un animal"
Para los especialistas las mascotas son el espejo de su dueño. Muchas veces hasta en el físico se parecen y la forma en que los tratamos revela nuestra personalidad, nuestras preferencias y nuestro estilo de vida.
Aqui un relato de una seguidora quien cree firmemente que las mascotas escogen a sus duenos y no viceversa.
Conocí a Nana y a Kilo cuando vivía en la playa de Punta Hermosa (Peru). Habiamos alquilado una casa entre cuatros amigos, era grande, con cinco dormitorios y una amplia terraza que daba al mar. Acostumbrábamos a dejar la puerta principal abierta, ya que siempre entraban y salían amigos. Una noche, como cualquier otra, nos encontrábamos charlando fuera de la casa cuando de repente apareció, un cachorro Labrador, que más adelante bautizamos con el nombre de Nana. Moviendo su cola sin cesar, parecía saludarnos dando vueltas entre nosotros. Me puso las dos patas encima, como diciéndome "Mira ponme caso". Noté que estaba flaca, desnutrida, sucia y con cortes en algunas partes del cuerpo,....hasta un trozo de goma de mascar tenía pegado. Decidí bañarla y darle de comer para que, por lo menos, es noche la pasara bien. Al rato la dejamos ir, al día siguiente Nana nos esperaba al pie de la puerta acechando a la primera persona que le abriera. Esta vez noté que estaba debil y tosía con frecuencia. La llevamos al veterinario y el diagnóstico fue bronquitis severa. Le pusieron una inyección y me dieron unas vitaminas para que se las diera dos veces al día. Ya en la casa improvisé una colcha para que durmiera y milagroasamente Nana respondio al tratamiento y al cabo de unas cuantas semanas su salud fue mejorando. Hoy, juguetona y vivaracha no me pierde ni pie ni pisada y corre conmigo por toda la playa. Fue precisamente en unas de esas carreras que un perro de raza Terrier Smooth la desafió. La persiguió por toda la playa para luego ladrarle ferozmente reprochándole haber perdido en lo que se convirtió en una competencia. Se hicieron amigos y con frecuencia nos lo encontrabamos en la playa o nos seguía a la casa. Cuán lejos de mi mente estaba, que ese Terrier se iba a convertir en mi segunda mascota. Un día mientras regresabamos de hacer unas compras en el mercado vimos cuando una camioneta atropello al Terrier. El perro salió corriendo de entre las ruedas, y herido fue a parar a la puerta de nuestra casa. Lo cargamos y lo llevamos a veterinario, allí permaneció interno. Así fue como nos enteramos que se llamaba Kilo y que había pertenecido a un ciudadano inglés quien al marcharse del Perú lo dejo a cargo de un amigo. Contactamos al amigo, para enterarle de lo ocurrido y se ofreció a pagar la hospitalización de Kilo. Los días pasaban y yo me moría de angustia por saber si Kilo sobreviviría y se recuperaría. Al 4to día me llamaron del hospital para decirme que se iba a recuperar. A la semana, estando en la cocina de la casa escuché unos ladridos, al mirar por la ventana ví a Kilo al pie de la puerta. Salí corriendo y Nana detrás, ahí estaba él moviendo la cola. ¡Yo feliz, me había escogido a mi! Desde entonces nunca se ha separado de nosotros.
Aqui un relato de una seguidora quien cree firmemente que las mascotas escogen a sus duenos y no viceversa.
Conocí a Nana y a Kilo cuando vivía en la playa de Punta Hermosa (Peru). Habiamos alquilado una casa entre cuatros amigos, era grande, con cinco dormitorios y una amplia terraza que daba al mar. Acostumbrábamos a dejar la puerta principal abierta, ya que siempre entraban y salían amigos. Una noche, como cualquier otra, nos encontrábamos charlando fuera de la casa cuando de repente apareció, un cachorro Labrador, que más adelante bautizamos con el nombre de Nana. Moviendo su cola sin cesar, parecía saludarnos dando vueltas entre nosotros. Me puso las dos patas encima, como diciéndome "Mira ponme caso". Noté que estaba flaca, desnutrida, sucia y con cortes en algunas partes del cuerpo,....hasta un trozo de goma de mascar tenía pegado. Decidí bañarla y darle de comer para que, por lo menos, es noche la pasara bien. Al rato la dejamos ir, al día siguiente Nana nos esperaba al pie de la puerta acechando a la primera persona que le abriera. Esta vez noté que estaba debil y tosía con frecuencia. La llevamos al veterinario y el diagnóstico fue bronquitis severa. Le pusieron una inyección y me dieron unas vitaminas para que se las diera dos veces al día. Ya en la casa improvisé una colcha para que durmiera y milagroasamente Nana respondio al tratamiento y al cabo de unas cuantas semanas su salud fue mejorando. Hoy, juguetona y vivaracha no me pierde ni pie ni pisada y corre conmigo por toda la playa. Fue precisamente en unas de esas carreras que un perro de raza Terrier Smooth la desafió. La persiguió por toda la playa para luego ladrarle ferozmente reprochándole haber perdido en lo que se convirtió en una competencia. Se hicieron amigos y con frecuencia nos lo encontrabamos en la playa o nos seguía a la casa. Cuán lejos de mi mente estaba, que ese Terrier se iba a convertir en mi segunda mascota. Un día mientras regresabamos de hacer unas compras en el mercado vimos cuando una camioneta atropello al Terrier. El perro salió corriendo de entre las ruedas, y herido fue a parar a la puerta de nuestra casa. Lo cargamos y lo llevamos a veterinario, allí permaneció interno. Así fue como nos enteramos que se llamaba Kilo y que había pertenecido a un ciudadano inglés quien al marcharse del Perú lo dejo a cargo de un amigo. Contactamos al amigo, para enterarle de lo ocurrido y se ofreció a pagar la hospitalización de Kilo. Los días pasaban y yo me moría de angustia por saber si Kilo sobreviviría y se recuperaría. Al 4to día me llamaron del hospital para decirme que se iba a recuperar. A la semana, estando en la cocina de la casa escuché unos ladridos, al mirar por la ventana ví a Kilo al pie de la puerta. Salí corriendo y Nana detrás, ahí estaba él moviendo la cola. ¡Yo feliz, me había escogido a mi! Desde entonces nunca se ha separado de nosotros.
jueves, 3 de febrero de 2011
SOLO POR HOY
Sólo por hoy
liberáte del ayer
y del mañana,
pues no existen...
Sólo por hoy
vive el hoy
y el ahora
de cada instante...
Sólo por hoy
desaparece el dolor
que vive en el ayer
y el miedo
que vive en el mañana...
Sólo por hoy
libérate
de la tiranía de la mente
y entrégate sólo a ser...
Sólo por hoy
y cada hoy
vive en el hoy
y en la magia de cada instante....
Issaac Alfonso Davis
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